domingo, 6 de noviembre de 2011

LA HIJA DE LA AMANTE


LA HIJA DE LA AMANTE… A.M. HOMES
Siguiendo en el terreno de la autoficción, casi la autobiografía ficcionada, LA HIJA DEL AMANTE es la historia verídica de una escritora que es adoptada, viene a sustituir a un hijo que se le murió a sus padres de acogida. Se encuentra marcada por este hecho y se siente la encargada de reponer a un hijo muerto. Un día decide conocer a sus padres verdaderos para saber cuál es su verdadera historia. Su pequeño mundo se revoluciona, ella se hace preguntas, todos los años se ha sentido como si la vida que llevara no fuese, en realidad, su vida, se la han prestado, como quien le da unos zapatos, unos pantalones o una camiseta.
La madre biológica desea verla, necesita recuperar el tiempo perdido. Pero la escritora no puede con eso, resulta demasiado para ella la insistencia de la madre en tan poco tiempo. No puede ser de repente la hija que no ha sido hasta ese momento. Pero quiere saber, conocer toda la historia aunque está condicionada por lo que los demás le cuentan o lo que ella se imagina. Todo es demasiado doloroso, además ella reflexiona a cada momento con las cosas, piensa sobre lo que pasó y ata cabos de cosas que son difíciles de comprender. Su padre biológico estaba casado cuando su madre se quedó embarazada, así que ella es hija de la amante. El padre siempre se comportará igual, como una persona que no quiere darle la identidad a su hija, no quiere que nadie la descubra y aunque la someta a una prueba de ADN, seguirá ocultándola.
La escritora, al haber sido entregada en adopción se siente como que no tiene identidad ni raíces y se embarca en un proceso para dotarse de la identidad que le han sustraído.
Y un día sucede que a lo mejor es demasiado tarde.
Una novela muy hermosa, dolorosa también, que recomiendo.

“Me desconcertaba cada terremoto de identidad, cada cambio en la arquitectura del marco precario que me había construido”.
“Me quedé un rato sentada sin hacer nada consolada por los ecos y objetos que eran como símbolos, recipientes de historia”.

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