DIR: Yojiro Takita. Japón 2008
El otro día en la filmoteca vi esta película que narra las vicisitudes de un violonchelista que se debe apartar de los circuitos musicales y se va a su antiguo pueblo para trabajar de amortajador. Lo mejor de la película es como trata el tema de la muerte y el duelo en distintas familias y los reparos que se tiene con una profesión que se dedica a este tipo de trabajo, que ellos toman por un ritual con el que se despide a los muertos, primero en el propio personaje, en su pareja y en el resto de la sociedad. Las imágenes son muy bellas y en la película domina todo el tiempo una chispa cómica que ayuda a quitar trascendencia a la importancia de la muerte y ayuda a que sea asumida como parte de la vida. El protagonista me ha gustado mucho, empieza como una persona que se deja arrastrar por las circunstancias y luego evoluciona. Muy recomendable.
3 comentarios:
Siempre estás en todos sitios eres un inquieto-cultural-viajero-lector-escritor........y muy buena gente..Besicos.
Cuando puedas me mandas un correo con los deberes....
Qué coincidencia, yo la saqué de Ficciones para el día de Navidad, y la verdad es que me gustó muchísimo. Y además, es una peli que crece en el recuerdo, se agranda y se hace más honda. Me alegro de que te gustara. Le dedicaré una entrada con otras películas vistas estas vacaciones. Feliz año, Rafa.
Yo también la vi en la filmo ^^
curiosamente tb le he dedicado una entrada XD
feliz año desde botones verdes
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