Sí, en este momento el año es un haiku. Algo breve pero muy intenso. Un banquete de 5-7-5 versos. Cuando toquen las campanadas en lugar de uvas saborearemos palabras, intentaremos buscar doce que hayan representado este año. Hay gente que piensa que 2011 ha sido un desastre, hay gente que despediría este 2011 con: inflacción, recortes, agujeros, crisis, calificaciones, recesión, ajustes, negativos, balance, déficit, estancamiento y el campanazo final lo acaban en parados. Yo prefiero otras palabras.
Felices haikus, digo últimas horas de 2011
4 comentarios:
Felices también para ti. Besos.
Un saludo desde Suecia!
Te encontré tarde. Ojalá vuelvas!!!
Ojalá vuelvas y pronto.Quizá podemos seguirte en otro sitio?
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