POCO SE SABE
Yo no sabía que
no tenerte podía ser dulce como
nombrarte para que vengas aunque
no vengas y no haya sino
tu ausencia tan
dura como el golpe que
me di en la cara pensando en vos.
JUAN GELMAN
DIRECTOR: ELISEO SUBIELA.
Año 1.993
El poema tiene el fin de ilustrar al comentario sobre la película el lado oscuro del corazón. Se lo quiero dedicar a María, porque ella fue quien me la descubrió. La integración de la película, lo visual y lo narrativo, con los poemas que va recitando su protagonista es sorprendente, poemas de Benedetti o Juan Gelman (el segundo siempre me ha gustado más) encajan a la perfección con lo que se cuenta; la historia de un poeta que desea descubrir el amor como bien expresa desde la primera secuencia en la que nos revela que lo puede perdonar casi todo en una mujer excepto que no le haga volar. Asistimos así a una película mágica, en los dos sentidos de la palabra: que embauca y donde sucede lo extraordinario (como cuando le entrega el corazón a Ana, al volar juntos por la ciudad haciendo el amor o cuando habla con su madre que reencarnada en una vaca), todo ello sin que notemos la diferencia, porque lo que sucede, tanto si es real como fantástico, es creíble. Pero sin duda lo más bonito de la película es la historia de amor con una prostituta y los diálogos con la muerte. La primera es evidente, Oliverio busca a la persona de su vida y la encuentra en la persona de Ana, pero desde el primer momento descubre que no podrá poseer su amor sino disfrutarlo. Ana se dedica a la prostitución y desde el primer momento le dice que su relación sólo será contractual porque ella es un ser libre y herido. Oliverio resulta bohemio, infantil y adulto, seductor y seducido a la vez, con miedos, esperanzas, con conflictos de su yo interno, con esa imperiosa necesidad de amar y ser amado pero siendo consciente de que la naturaleza del amor implica que éste debe ser breve. Un ser con contradicciones, como todos, pero que sabe vivir su vida al límite.
La muerte es una mujer de carne y hueso, que en todo momento mantiene una relación dialogada con él que es de lo mejor de la película. Ella aparece como si estuviera enamorada de él, pero reflexiona sobre su propia naturaleza. Él la trata con la arrogancia del que sabe que por el hecho de ser muerte se ve obligada a ser sólo una sinrazón y no poder disfrutar con plenitud de la vida.
Una película muy recomendable. Por cierto, como el protagonista se llama Oliverio y el de Rayuela; Oliveira (y para mí es la mejor novela que he leído nunca) estaba pensando todo el rato que era la novela.
Os dejo algunas diálogos:
La muerte le dice “un poeta hablando como un camionero, si no te llevo es porque aún seguís diciendo algunas palabras y mientras las sigas diciendo me está prohibido tocarte
¿Qué palabras?
Con el correr del tiempo las vas a ir olvidando y entonces vas a quedar en mí poder”
OLIVERIO “¿Cómo amar sin poseer? ¿Cómo dejar que te quieran sin que te falte el aire, amar es un pretexto para adueñarse del otro, para convertirlo en tu esclavo para transformar su vida en tu vida ¿Cómo amar sin pedir nada a cambio, sin necesitar nada a cambio?
Y CUÁNDO YA ANA LE DEJA: “Ana me partió el corazón pero al herirlo lo creó, nunca lo entenderías. Mi pobre Ana, mi querida Ana: Nunca hubiera podido pagarte esto que hiciste en mí, iluminaste el lado oscuro de mi corazón ¿Por qué decidiste permanecer pobre dejándome a mí rico”